Hoy hemos despedido el mes de mayo con una ofrenda de flores a la Virgen María. Le hemos recitado poesías, hemos cantado y rezado sabiendo que Ella es nuestra Madre y el mejor camino para llegar a Jesús. Nos han acompañado algunas religiosas y nos han dado un consejo: todo lo que os preocupa contádselo a la Virgen porque en Ella tenéis un refugio seguro.
¡Gracias María por ser nuestra Madre y amiga!





